Es imposible explicar en unas líneas el sistema que uno sigue para gestionar un ser vivo, como lo es también la huerta, pero intentaré dejar claros los principios que sigo. Antes, las explicaciones de mi situación particular:
a.- aquí hay poca capa de tierra vegetal, y muchísimas piedras. labrar cada bancal es un esfuerzo enorme, ya que hay que hacerlo a pico y carretilla, y es necesario aportar kilos y kilos de estiércol o compost para generar el volumen de sustrato necesario. Esto condiciona mucho.
b.- no hay acceso para vehículos normales: nada de traer el tractor a que te are la parcelas, y la cuba para que lo abone.
c.- en Vega de Pas lo único llano es la plaza del pueblo. Todo son cuestas y no hay sitio adecuado para la huerta.
O sea: poquita supercifie de cultivo, e intentar máximo rendimiento. Para ello, algunos principios de funcionamiento:
a.- bancal profundo: esto es, se labra la tierra en mucha profundidad, la primera vez, y se evita pisar el suelo de cultivo. Así las raices crecen mejor hacia abajo, y podemos poner mas plantas en menos sitio (al que le interese, le aconsejo leer a John Seymour).
b.- rotacion de cultivos: evita parásitos y plagas y mejora los cultivos por acción de los cultivos precedentes. En mi caso, con tres bancales para cada ciclo, y aunque nunca lo cumplo a rajatabla, la intención es
año 1 : Tubérculos (patata temprana + patata de temporada + otras patatas de capricho que voy probando)
año 2 : Leguminosas (habas + guisantes + judías)
año 3 : Varios (acelgas, calabacín, lechugas, pepinos, calabazas. Aquí no se me dá bien el tomate, ni los pimientos ni las berenjenas).
año 4 : raíces (ajos, cebolla roja, cebolletas, zanahorias, remolachas)
c.- ciclos cortos : para evitar parásitos y ataques varios, me va mejor con las variedades tempranas, sobre todo con puerros y las de la familia de las coles, repollos, coliflor y brocoli.
d.- cultivos compatibles y cultivos en sucesión : fundamental para sacar el máximo partido en pequeñas superficies. Se trata de cultivar juntas especies compatibles por tamaño, necesidades y desarrollo en el tiempo. Un ejemplo : cuando pongo berzas o similares, planto lechugas en medio y antes de que la berza crezca lo suficiente para que lleguen a molestarse, la lechuga ya está para comer y puede dejar hueco a las primeras para que crezcan a su gusto. Otro : rabanitos en las hileras de en medio de casi todo, por lo rápido que se recojen. Otro: allí donde quites un repollo, planta el mismo día una lechuga, y posiblemente te dé tiempo a comerla, aunque no esté de concurso, antes de que te comas el resto de los repollos y dispongas del bancal entero. Aconsejo el libro El huerto urbano: Manual de cultivo en balcones y terrazas, de Josep M. Vallès, que aunque es para huertos urbanos, explica estas ideas muy bien.
e.- riego: ahora estoy poniendo mangueras exudantes, ya que no puedo regar todos los días. Me gusta esta idea que ví en la literatura de Gaspar Caballero de Segovia. Sus diseños son además preciosos, su método tiene muchas cosas que me gustaron y aplico, a mi manera, alguna de ellas en el remix que es mi huerta.
Además de todo esto: planificación y una libreta, replanteo y espaciado riguroso (yo que soy muy muy cuadriclulado, lo hago todo con cuerdas), semilleros aparte para transplantar las plantas lo más hechas posible y ganar tiempo y muy importante : planificar los cultivos de invierno (se pueden sacar kilos y kilos de coles y nabos cuando nadie tiene ya nada).
Y uno muy bueno, con historieta: cuando era chaval, en mi equipo de rugby teníamos unos libros de entrenamiento, uno por puesto. Todos empezaban igual: leer, ver y hablar cuanto sea posible de rugby. Pues eso hago, aprender de los demás.
ABONADO:
Los criterios de abonado en agricultura ecológica son bastante estrictos, y no dejan a los que son sólo agricultores muchas alternativas más que aprovechar su propio compost y comprar humus de lombriz o similares.
Por suerte, yo tengo vacas y cerdos, y por tanto un buen suministro de estiercol. Éste, mezclado con los restos de paja de las camas de los animales, y bien compostado, es lo mejor.
También se permite el uso de estiercol externo, que proceda de ganadería convencional extensiva (por lo que es mas dificil de recoger), que esté compostado en la explotación, y en ocasiones lo usamos, para dejar las boñigas para abonar el prado, que también lo necesita.
Yo abono cada parcela de mi huerta siempre el primer año del ciclo, y el segundo y tercero, en funcion de como vea las tierra y las disponibilidades, meto el compost, más abono o ceniza. El cuarto año, el de las cebollas, no abono, ya que se horquillan si lo haces.
Para los groselleros uso lo menos bueno: abono más fresco, sin compostar, o la hierba segada de alguna esquina que se empezóa a pudrir, o un montón de compost que no terminó de hacerse y lo tengo que quitar. Sobre la marcha.
Algunos años, hace tiempo, acolché con algas recogidas en la playa, y dieron muy buen resultado. Luego se compostaron muy bien atrayendo a muchas lombrices. Pero me enteré que es necesario obtener permiso para recogerlas, y de momento he dejado de hacerlo.